¿Cómo defines una experiencia ideal para los asistentes de tu evento?

Nuestro webinar del pasado miércoles impartido por Moisés Moreno, consultor tecnológico que ha asesorado a diversos meeting planners para la organización de eventos, fue una grata experiencia.

En esta interesante transmisión vimos que tan importante es diseñar una experiencia ideal para los asistentes de un evento, no solo en materia de cumplimiento de protocolos para la nueva normalidad en la industria de reuniones, sino que también profundizamos en el deseo de los asistentes, que más allá de solo asistir a una reunión, buscan aprender y experimentar sensaciones agradables que sin duda les hará recordar el evento y querer repetirlo.

Para ver la transmisión de webinar, sólo debes dar click aquí.

Esto es un claro ejemplo de como los invitados se vuelven fanáticos y que inclusive adquieren entradas con un año de anticipación.

Esta reflexión me remite a un evento al que asistí el año pasado: me recuerdo emocionada y ansiosa, esperando día a día la fecha marcada en mi calendario para poder disfrutar de mi evento favorito.

Por fin, el momento llegó y cuando entre al recinto me sorprendí al encontrar en el lobby tótems táctiles en donde pude realizar mi registro al evento y evitar una laaaaaarga fila.

¡Eso fue un gran alivio, porque odio las filas!

Lo que también me pareció genial, es que pude utilizar una aplicación oficial del evento para consultar en que salón se iban a realizar las conferencias, los cambios de última hora e incluso realizar el pago de mis alimentos mediante un código QR.

¿Cómo puedes asegurar el éxito de tu evento?
¿Cómo puedes asegurar el éxito de tu evento?

Es así que entendí desde la perspectiva de un asistente lo que es realmente tener una experiencia ideal, misma que me sirvió de inspiración para participar en este webinar que sin importar que aunque ni la audiencia, ni los anfitriones coincidimos en el mismo lugar por la contingencia, pude sentir la emoción y participación de nuestros asistentes.

Al terminar la transmisión por facebook live, enviamos un correo a nuestra audiencia con una encuesta de satisfacción para saber que momento de nuestro webinar les gustó más, la parte que no le gusto y en qué podemos mejorar, así como su sugerencia de nuevos temas para futuras transmisiones. ¡Obtuvimos muy buenas respuestas!

Y es aquí donde me doy cuenta que de toda forma y en todo momento puedo contar con la tecnología para dar un grato recuerdo, así como tú puedes dar una experiencia ideal a los asistentes de tu evento.

Conventio es la plataforma que te ayuda a diseñar las mejores experiencias para tus asistentes.

La identidad universal

Teseo volvía de la Isla de Creta, después de múltiples empresas. El regreso era un viaje largo, y su barco había enfrentado miles de batallas, por lo que pronto comenzó a deteriorarse, sufría constantemente de averías que requerían cambiar sus tablones por aquellos en la bodega, cambiarlos de lugar e ir reemplazando sus piezas con aquellas que iban comprando durante su camino. Al final del viaje, todas las piezas del barco habían sido reemplazadas en su totalidad, y cuando en el puerto le preguntaron a Teseo “¿Qué tal el viaje en tu barco?”, este se preguntó si realmente era aún su barco, o no, al estar totalmente reconstruido.

Esta, es “la paradoja de Teseo”, y es una de mis favoritas. Cuestiona el milenario problema de La Identidad, aquello que hace que una cosa “sea” ella, o bien, que una persona sea la misma que conocemos, a lo largo del tiempo. ¿Qué pasaría si aplicamos esta paradoja a una persona? Cual hombre bicentenario de Asimov, pero al revés, podríamos ir reemplazando cada una de nuestras partes biológicas por partes mecánicas, ambos brazos y piernas, órganos, cerebro, todo, y entonces, ¿Al final seriamos la misma persona?

Encuentro la demostración de identidad en la confiable prueba del tiempo. Cuando uno se va, cuando abandona, y muchos, pero muchos años después se reencuentra con aquellos que le conocían, no basta el nombre para que te identifiquen, y antes de llegar hasta las anécdotas que juntos vivieron, la mente de aquellos que conocimos se esfuerza al máximo por recordarnos mediante una sola, simple y elegante prueba: Nuestro rostro.

Ya nada de nosotros es lo mismo que hace 7 años. Todas nuestras células se han regenerado, nuestro cabello, piel, uñas, incluso vivencias y experiencias, han cambiado. Nuestro rostro también, pero, ha tenido más bien una metamorfosis, y ese cambio es aún calculable por los demás para saber que nosotros somos nosotros. Y ahora, no solo las personas lo pueden determinar, también las máquinas.

Minuto con minuto, los algoritmos de reconocimiento facial se van haciendo más complejos, más robustos, y permiten transformar nuestro rostro a datos que las máquinas entienden, transmiten, almacenan, para saber que nosotros, con cierta metamorfosis, somos nosotros. Esta tecnología cobrará relevancia especialmente ahora, en el mundo post-covid, donde ser identificado de forma automática al llegar a un recinto, sin necesidad de tocar nada ni hablar con nadie, puede ser muy valioso para evitar contagios. Entre otras ventajas, la identificación facial podría ir más allá y detectar edad, género, emociones e incluso estados de ánimo, para enriquecer la experiencia de los visitantes a un evento.

¿Cuáles son las ventajas del reconocimiento facial?

Bastará entonces portar aquello que nos puede identificar incluso aunque hayan reemplazado todos nuestros tablones en el viaje: Nuestro rostro. Eso sí, déjandole a la máquina ver brevemente nuestro rostro detrás del cubrebocas.